El fiscal Spelta dijo que la hipótesis principal es que el traficante que le prestó la camioneta a la víctima fatal era el blanco deseado de los 30 disparos realizados por los asesinos. Le revocaron la prisión domiciliaria y lo envían a una cárcel de máxima seguridad
La investigación por el brutal asesinato de Alejo Rodríguez (23 años) ocurrido el miércoles pasado en Funes tuvo un importante avance. El fiscal Adrián Spelta, a cargo del caso, sostiene como principal hipótesis que los 30 tiros realizados por los sicarios eran en realidad para Lucas Emanuel “Doc” Bejarano, un narcotraficante con condena que habitualmente usaba la Hilux roja. En ese marco, la Justicia federal de Rosario ordenó revocar el arresto domiciliario que tenía Bejarano y pidió su traslado al penal de Ezeiza.
“El joven no era el objetivo principal, era ajeno al ámbito delictual. No así el titular de la camioneta, que tiene una condena de la Justicia federal y con quien (Rodríguez) mantenía una relación de amistad”, dijo Spelta este viernes en conferencia de prensa.
Según agregó el fiscal, Rodríguez, además de trabajar como barbero, “hacía changas, colaboraciones” para Bejarano. “Le llevaba la moto en una camioneta para hacerle unos arreglos, pero cuando salió del domicilio (del narcotraficante) lo abordaron a las pocas cuadras y le dieron 30 disparos”, explicó.
Bejarano, tal como ya publicó Rosario3, figuraba como autorizado para manejar la Hilux roja a pesar de no ser el titular, y había sido atacado recientemente, el 27 de mayo pasado, cuando le dieron dos tiros en el barrio de Nuevo Alberdi y tuvo que ser asistido en el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria.
“Doc” fue condenado el 16 de octubre de 2020 a la pena de 4 años de prisión por narcotráfico, de acuerdo a la resolución del Tribunal Oral Federal Nº 1. Como ya contaba con una sentencia provincial de 2 años de ejecución condicional que data del 27 de julio de 2015 por robo calificado, el monto total fue unificado en 6 años.
Ahora, con el asesinato que tuvo lugar en Funes, la Justicia federal le revocó la domiciliaria y ordenó su traslado a Ezeiza, donde deberá cumplir lo que le resta de la pena, que son 2 años.
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